TARRAGONA

TARRAGONA

Hola: ángeles de mi corazón... Soy el cuenta cuentos de La Danza…

“Tarragona y su vermut”

Hola amigos: hoy nos encontramos en la ciudad portuaria de Tarragona. Su ubicación besa la orilla del Mediterráneo en la Costa Dourada, con esas playas de aguas cálidas, así como sus centros de recreo y tradición histórica y patrimonio artístico. Todos estos ingredientes han sido la causa de que me enamorara de estas tierras y acabara viviendo en ellas.

Su origen se remonta a la antigua Tarraco romana, capital de la Hispania Citerior Tarraconensis. Su conjunto arqueológico, ha hecho que Tarragona sea considerada, junto a otras doce poblaciones españolas, Patrimonio de la Humanidad…

En ella bailo a diario; pues en ella paso la mayor parte del tiempo. Y, en ella, puedo degustar más ampliamente su genuina gastronomía. 

Tarragona es el reflejo de su personalidad histórica y cultural: como puerto del Mediterráneo su riqueza viene del mar. Se pesca el marisco y pez azul; reconocido por la Denominación de Origen de Pez Azul de Tarragona.

En el Serrallo (barrio de pescadores de Tarragona), es donde me gusta ir a comprar y mirar los productos de esta tierra henchida de mar y sal. En él, se pueden encontrar varios restaurantes que ofrecen una cocina basada en los productos frescos del mar. A mí me privan las sardinas…

Los platos más típicos de Tarragona son la cassola de romesco, el arrossejat, el arroz negro, así como el pescado a la plancha o frito. Muchos de los restaurantes que ofrecen estos manjares están situados a poca distancia del mar, lo que hace que sus platos estén elaborados con pescado fresco, además de poder disfrutar de maravillosas vistas y del ambiente típico del Serrallo.

Merecen una citación en especial, a parte los vinos Denominación de Origen Tarragona, las mistelas y vinos rancios ideales para acompañar los postres. Hay que decir que los vinos de Tarragona, sin pretensión alguna de nobleza, son merecederos de estar en las mejores mesas y cumplir un buen papel.

En la Parte Alta (casco antiguo): de la ciudad; que es donde yo resido, hay también muchos restaurantes típicos que se encuentran en edificios históricos que transportan al gourmet a la época del esplendor imperial, o a los años de la difícil reconquista. Para completar esta ambientación histórica, en el mes de mayo se celebran las jornadas gastronomico-culturales Tarraco a Taula, que ofrecen la oportunidad de catar algunos platillos extraídos de recetas romanas.

En Tarragona también son típicas las llesqueries, que con la llegada del buen tiempo se puede disfrutar en sus terrazas para tomar el vermut antes de comer.

Como veis con Tarragona no puedo ser objetivo… ¡¡Os invito a que vengáis!! No os arrepentiréis…

“Tarragona y su vermut”

Antonio Canales