GIRA DEL NORTE

GIRA DEL NORTE

Aquella mañana fría de enero en pleno temporal de nieves y tragedias, y desmesurada inestabilidad meteorológica en toda la península, me dispuse a comenzar mi nueva temporada viajando desde Madrid a San Sebastián, y con aquella proeza, inaugurando la Gira Flamenco del Norte...

Salí a media mañana, cuando es la hora más templada del día, para así evitar las heladas más crudas, agentes atmosféricos variados y, sobre todo, los temibles y traicioneros bancos de niebla... Con mi Lunita bien abrigada, al lado, el coche con todas sus revisiones pertinentes, bien realizadas, y mis bártulos matemáticamente acomodados... Salí con la ilusión estampada en los dos dedos de frente que asomaban entre el gorro de lana peruana y mis tupidas cejas de Triana...

Y parecía que iba bien los primero 80 kilómetros... Pero al llegar al puerto de Somosierra la temperatura cayo en picado hasta los -5 grados, y comencé a ver sobre el asfalto una alfombra de hielo duro y resbaladizo no apta para ir sobre ningún tipo de ruedas... Al poco que veo un camión derramando sal y ¡vi el cielo abierto! Que no era el caso, lo del cielo abierto, porque estaba tan oscuro, tenebroso y tapado como si fuese a llegar el Armagedon de un momento a otro ... Bueno, fue un alivio momentáneo digno de agradecimiento Cívico y civil... Me coloqué con verdadera saña y pericia detrás de la máquina aquella, a treinta y tantos kilómetros por hora. Y así; como si fuera una carroza que hace las arenas del Rocío caminé, durante hora y algo, sin perder los raíles de la marca que iba dejando con tanto salero sobre el asfalto helado aquella pesada fiera de hierro.

En un desvío se fue, y la perdí de vista...

Comencé a descender el puerto algo más animado y hubo un atisbo inesperado de luz, que no sol, en el horizonte crepuscular y anémico; esto es para darle ese pellizco de romanticismo a la mayor de las cagadas, y me dije: Burgos a la vista... Aunque aún faltaban una centena de Kilómetro .... Durante un ratito el Meteo se portó bien y se estuvo quietecito.

Al ir acercándome a Palencia, tierra seca y dura y castellana donde las haya, el termómetro se colocó esta vez en -7 grados, haciéndome una gracia en El Centro de mi estómago ya bastante asustado... Y, sin avisar y en silencio, empieza a caer la nieve lenta, monótona, armoniosa y casi sin mojar, al principio, llena de melancolía y melismas varios. Salgo como un resorte de mi estado y apago Radio Nacional Clásica de un golpe, porque todo esto me estaba nublando el pensamiento y la visión mucho más.
Algo me susurró al oído, /esto es fabuloso,/.... Lentamente pulse con cuidado el botón de la ventanilla y abrí un filo del cristal, como si la nieve tuviese un olor especial, aspire profundo su perfume invisible y me dije: voy flotando como si fuese un sueño de esos en la Ponia, montado sobre un carro de renos mitológicos ... Y pensé, que grande eres Iberia de mis entrañas... Y me conmoví  fíjate.

...Ese fue el momento que aproveche para hacer una parada y repostar combustible, estirar nuestra extremidades y vaciar las vejigas ... Y contemplar asombrados la belleza de la vida.

Mi Luna jugaba con la nieve a dos pasos de mi...


CONTINUARÁ.....

4 comentarios:

  1. Un relato tremblemente realista, lleno de poesía.. admiro como de un simple relato , un viaje de Madrid, hasta el Norte, se convirtió en algo lleno de poesía, de dulzura desde luego no pasa un día sin que me sorprendes, cada uno de tus relatos es una precisión, una joya de ternura, de cariño,eres simplemente Genial....

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    1. Escribir es una ventana que cada día tengo que abrir .... Para que mis pulmones se llenen de ese aire invisible que me hace respirar y tomar la vida en un aliento.... Muchos abrazos

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  2. Hermosa narración poetica, Haces que un simple viaje parezca un cuento de hadas , una película de Coctea. Sentimos ese placer, el placer de lo bello ( aunque sea peligrioso) he dejado que los copos se queden entre mis pestañas, te he visto entre esas sombras que se ven cuando nieva pero que sabes que están ahi para embellecer lo que vemos. Maravilloso relato, eres magico y todo lo conviertes en poesia.Muchas gracias por tu maravillosa existencia

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  3. Mi vida siempre está en tránsito... Aunque de El hago mi refugio y mi hogar en cualquier sitio mi amiga... besosss

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