LA NIEVE
Hola: ángeles de mi corazón... Soy el cuenta cuentos de La Danza…
Todos los milagros tienen una medida, como los guisos un punto de cocción, si te pasas, ya sabes, el cuadro se puede estropear.
Cuando hay escarcha en las ventanas y los cielos de noche son dorados quiere decir que hace un frío que pela, se tiene que abogar por el cobertor de plumas y dejarlo al menos a los pies del tálamo.
La escarcha siempre me recuerda a la niñez. Se me viene al pensamiento mi madre Pastora, una mujer de bandera que es muy sabia, con mucha gracia en el contar. Es alguien muy especial, entrañable y como de pueblo. Me encanta como se recoge las faldas, como se esconde con los ojos... Sabe muchas cosas y me hizo saber algunas de las que no tenía la más remota idea.
Algunas eran fuertitas y, con una especie de amargor en el semblante, ponía un dedo sobre mis labios para que no preguntase más... Lo más bonito que recuerdo de ella durante la infancia es que era igual en privado que en público, llena de naturalidad y salaisima...
Y otras cosas más privadas, sobre el baile flamenco, que me dejaron entender muchas cosas. Ay, esta vida como es... Se tiene que ser artista para medio entenderla...
Antes de marcharme para Madrid, a emprender mi camino de la Danza, me dijo al tiempo que me miraba con ojos protectores. No vayas nunca de pobrecito por el mundo. Se valiente y duro como el pedernal, pero también anda siempre con dignidad, cariño y educación.
La gente es que a veces confunde la fuerza con la dureza, la suavidad les parece una debilidad. Y es bonita eh, bien bonita, pero muchas veces falta algo de dilatación en los corazones y se vuelven hoscos y huraños, esa apertura que deja la flor o todo lo que es vegetal, marino... Natural. Se feliz mi Antoñito aún cuando todo lo empape la escarcha.
No entendiendo demasiado como esta especie de criaturas tan buenas e inmensas, como mi madre, sobreviven en este terrorifico mundo y además piensan estas maravillas y son capaces de decirte unas cosas que ellas (tan poderosas y autosuficientes) nunca se atreverían a decirse a sí misma. ...Aún cuando todo lo empape la escarcha..... Muero de amor.
Antonio Canales....
Que cuento más bello el de hoy con Pastora de personaje principal, me encantaría poder tomar un cafe con ella, hablar y escuchar, debe de ser una gozada escucharla. Seguro que habla con la naturalidad y franqueza de sus bellos ojos azules. Me recuerda mucho a mi madre...
ResponderEliminarGracias mi Antonio por dejarme entrar contigo en un trocito de tu vida.
Te quiero, te lo he dicho con el viento....
Hola mi Rosa, si ella es pura naturalidad y a su lado a veces el tiempo se detiene... Ya he visto que Rubí marchó ... Te mando muchos besos muchos...
EliminarCuando todo lo empape la escarcha se feliz, que ternura en esas palabras , como se nota esa complicidad con tu mamá, preciosa Pastora, una capa protectora de suavidad y de amor siempre a tu lado cuando lo necesites, es lo que intento ser también con todos los que amo, una capa,para dar calor y protección, será eso debilidad? te quiero tanto que te envolveria en un mantel para que nada ni nadie te dañe...
ResponderEliminarMe puse a leer de nuevo Bernarda Alba, y es como si estuvieses presente, Eres Bernarda, totalmente, es una emoción enorme..
Un beso fuerte fuerte mi querido amigo, y cariño, de eso jamás hay de sobra...
Que persona con más corazón y más atenticida... Te quiero mucho y no es debilidad eso que sientes, muy al contrario es amor y vitalidad... Yo ten envolvería con las alas invisibles de toda la dulzura que pudiese encontrar.. Bernarda es un trago amargo que a veces debemos tomar para no olvidarnos de alguna cosas... Te quierooooooo
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