FLORIDA

MIAMI

Hola: ángeles de mi corazón... Soy el cuenta cuentos de La Danza…

... Cinco días y cuatro noches dando vueltas por esta bella Florida dan para mucho. Tan cambiante, tan tupida, tan llena de sol y de aromas. Te deja el corazón y la piel impregnados de un sudor y una humedad sabrosona y vital. Acabas con el cuerpo completamente envuelto y empapado en un sudario de coral y flores. Tus sábanas son como el pañuelo húmedo de una virgen sobre la frente del bendito. Pero sobre todo, este Miami arrebatador y luminiscente es pura vida...

Con esa temperatura amable que le acompaña día y noche, miércoles y domingos, febreros y septiembres... Y que te invita a rebasar cualquier cosa impensable. Con esa cadencia transgresora, muy lejos de las incómodas normas que el ser humano se impone sin sentido. Quizás, sobrellevarlo a diario, sea un poco agotador y apabullante para los sentidos, se diría que el ser humano necesita también de las umbrías y sequedades. Pero no obstante, el pasajero de turno; como en mi caso, disfruta de lo lindo entre tanta filigrana de hermosura, color y sabor en el vivir. Es Exuberante y selvática, y nada de lo que el Hombre ponga sobre su frente conseguirá velar, enturbiar o confundir su naturaleza furiosa e indomable. Ahí reside su embrujo...

Llevo una treintena de años conociéndola y observo ensimismado, como hay cosas y lugares que van cumpliendo años apaciblemente, y se convierten en Historia que perdura sobre el tiempo. Ese arte modernista, que encantaría en su momento al mundo, se quedó parado en el tiempo para ser siempre un vivo ejemplo de lo más genuino en cuanto al color y las formas. Más otro Miami, muy diverso, crece a su alrededor a pasos agigantados. Barrios y distritos que eran imposibles de transitar y peligrosos de sobrevivir, ahora son una oferta de placeres novísimos y súper actuales. Lo más IN; como dirían ellos. No los Yankees, que acá los pocos estadounidenses que trasiegan y conviven son latinos de corazón al ciento por cien. Es la vez que he escuchado hablar menos Inglés estando en Norte América que recuerdo. Porque esto no es USA, ni mucho menos, esta tierra más bien se USA para vivir, reír y disfrutar, amar, solazarse, bailar, comer, engendrar y convivir y dormitar y gritarrrrr... O sea chicos, el PARAISO.

Antonio Canales