REVOLUCIÓN

REVOLUCIÓN 

Hola: ángeles de mi corazón... Soy el cuenta cuentos de La Danza…

En toda relación de afecto es esencial la empatía. Es decir, la capacidad de compenetrarse con la experiencia de otra persona y comprender y sentir su alegría y sus penas, su dicha y su angustia...

Ahora que me encuentro en una segunda etapa de mi vida, estoy valorando muchísimo mas cada viaje y cada estancia en los diferentes puntos del Planeta donde dirijo mis pasos. Esto me hace tener una percepción muy veraz de como se esta moviendo la humanidad y sus interés... No es que yo sea mas listo o inteligente que otros. Solo que mi vida es un constante viaje de ir y venir y estar. Y, claro, si eres un poco sensible y estas medianamente atento a lo que te rodea y, por supuesto, tienes el tiempo y la edad; como es ahora mi caso, para verlo todo con una pausa y dedicación que los años van depositando en uno convertidos en sacos de paciencia y tolerancia. Pues acabas viendo con claridad y en primera persona, como se están desarrollando los acontecimientos y las claves en este nuestro bello planeta llamado Tierra.

Y la verdad, sea manifiesta, que aveces me asusta el camino, las formas y la dirección que están tomando las cosas. 

Todo esto, tristemente, me lleva a un callejón sin salida, ya que el análisis de todo lo que ocurre es como un interminable túnel donde jamás podremos ver el final.  He conocido las más dolorosas de las pobrezas y, también, las más floridas de las riquezas... Hablar de razas, costumbres y religiones no quiero... Ni tampoco quiero hablar de continentes, países o pueblos. Son demasiados para poder analizarlos bajo el prisma de la quimérica equidad... Lo que si os puedo decir, con certeza, es que después de dar la vuelta al mundo en más de tres ocasiones, en las que he visto guerras, golpes de Estados, revoluciones, caídas de muros y lamentos, lo que menos he observado crecer en estas últimas y oscuras décadas ha sido la Bonanza... 

Antonio Canales